Un día escribí algo sobre Ruinas y me publicaron en Boca de Sapo = efecto dominó 😊
(Corto y pego por acá un adelanto pero en el link de más abajo está todo)
ACERCA DE LO TAMBIÉN INFLAMABLE
Es
cierto: algo se prende fuego sobre el durlock maltrecho de las paredes. Acaso
sea la vena eléctrica (antes vital, ahora tóxica) escondida entre los huecos
desfigurados de los ladrillos; el borde – cada uno de los bordes, también rojos
– de los dos portarretratos cuyos rostros juramos desconocer; la brutalidad
artificial del fresco, salvado de la venta de garaje, cuyo drama secuencial
insiste en formar una mímesis algo exigida con el impacto de la combustión.
Dormimos.
Nos sometemos a la profundidad del sueño (a su indulto sobreentendido) con una
obediencia mística. Dormimos pero los ojos y las arterias coronarias siguen
abiertos. Me busco en la trivialidad conceptual de nuestra mesa de escritorio,
y escribo, caprichosa y ácidamente, sobre la inmoralidad elemental de nuestra
existencia (inútil, transitoria, falsa). Por el costado menos maltratado de una
ventana alcanzo a ver el fuelle de las valijas. Puede ser que algo inservible,
y por defecto mal acomodado, nos haya quedado dentro. Puede ser que decidamos
quedarnos si todo aparece (si todo emerge del núcleo demorado) como fingimos
planear [...].