mayo 28, 2021

LA VERDAD SE IMPONE / THE TRUTH IS FORCED

 

Como no soy honesta en persona

busco ser honesta en la poesía.

Si hablo contigo, mirándote a los ojos,

miento porque no tolero

evidenciar la verdad.

Decir toda la verdad

sería como quedar desnuda.

Perdería mis más preciados bienes:

distancia, silencio, intimidad.

Quedaría expuesta. Y me poseerías.

Equivaldría a una total rendición

(a ti, mirándote a los ojos).

Me mirarías detenidamente.

Me tendrías en tus manos.

Todos tus ojos se me echarían encima.

De ahí en adelante me vestirían

tus punzantes, lascivas, deseosas abejas.

Que seas uno o dos o muchos

da igual. Siento como si, en realidad,

un par de ojos fuera el enjambre entero.

Así que miento (mirando tus ojos)

dejando sin voz la esencia de las cosas

o bien mostrándome como una copia

y no lo que soy.

 

Uno debe ser honesto en algún lugar.

Quiero serlo en la poesía.

Con la palabra escrita.

Donde pueda decir y tachar

y volver a decir y decir con rodeos

y decir por encima de y decir entre líneas

y decir en símbolos, en enigmas,

en doble sentido, bajo las máscaras

de cada rasgo, en la piel

de toda criatura.

Y en mi propia piel, desnuda.

De hecho me siento feliz de anhelar

desnudarme en la poesía,

imponer la verdad

en el poema,

que, al escribirlo, si es real,

no copia, me diga,

y después a ti (todo o nada, mirándonos)

mi entero yo,

la verdad.

 

---------------------------------

May Swenson (USA; 1913-1989). Poeta, escritora, docente, editora, traductora, dramaturga. Activista lesbiana. Recibió la Beca Guggenheim en 1959. Entre los años 1980 y 1989 se desempeñó como canciller de la Academia de Poetas Americanos.

Traducción: Jeannette L. Clariond

mayo 22, 2021

★I WRITE


«Exit» es uno de los pocos poemas del libro Los demás© que, durante las pruebas de galera, dejé sin editar. La versión que aparece es exactamente la misma versión que escribí originalmente, allá por 2015. Lo leí por primera vez en público en un Festival de Poesía organizado por APOA en Buenos Aires, en 2016. Alguien me filmó mientras leía. Ahora ese registro se convierte en una especie de auto-challenge que, como un anuncio reloaded de actualización de aplicaciones, acecha desde la ventanita emergente de la pantalla. 

Acá se los dejo.




  



en este sueño siempre hay un pájaro que me deconstruye

me arrastra con su porción de canto

a un caos nuevo

a un muro encefálico no verbal no mítico

ensangrentado de otros muros

de otros bloques de muros ciegos

envenenados

o envueltos en el espanto

 

escribo;

en este sueño no alcanza el lenguaje porque las señas

-igual que los llantos-

pueden durar muchos años

 

escribo con los pedazos que van dejando las palabras de otros;

busco el ovillo del hilo que va a salvarme del monstruo

busco el monstruo

que sigue asesinando el fondo del costurero

 

escribo

en este sueño de caos tóxico

escribo pero no alcanza

(escribo

mientras un pájaro canta)

 

------------------------------------------------------------

 

in this dream there is always a bird that deconstructs me

it drags me with its singing portion

to a new chaos

to a non-mythical non-verbal encephalic wall

bloodied from other walls

of other blocks of blind walls

poisoned or surrounded in horror

 

I write;

in this dream language isn’t enough because the signs

-as well as the crying-

can last for many years

 

I write with the pieces that leave the words of others;

I look for the ball of thread that is going to save me from the monster

I look for the monster that keeps killing the bottom of the sewing box

 

I write

in this chaotic toxic dream

I write but isn’t enough

I write

while a bird sings) 

  

Traducción: Natalia Romero


mayo 13, 2021

★YO TAMPOCO

  

adentro mío hay un temblor

y no sé

cómo se apagan los temblores

(por qué parte del cuerpo

se los atrapa)

 

siempre te estoy queriendo perder

te estoy queriendo preguntar

cómo es andar toda la vida de una punta a la otra

con el nombre de una provincia canadiense a cuestas

y si es verdad

que así se llaman también

los mártires del 6 de octubre

y la canción número 7 de un disco de Eric Clapton

 

te podrías haber llamado

                                                         Adelaida Berenice

y entonces todo sobre tu nombre ya hubiera estado escrito

 

pero no (otra vez no)

no hago más que anotar frases que deberían descongelarte – tendrían que –

pero no (otra vez no)

 

y no hay como la onomástica

para ir mejorándonos las obsesiones

 

 

«Yo tampoco soy ninguna» (fragmento); de Límbica© (El Taller Blanco, 2020)