a mí me
habían dicho que algunas cosas son más que sus nombres
que
todos los días tienen derecho a ser domingo
que
todo sonido regresa
que
todo lo que envejece o muere o cae o desaparece
que
todos los que escribimos somos misántropos y anónimos
que
todo lo que es
también
no es.
a mí me
habían dicho; pero el nombre no importa:
la
rosa
aún con
cualquier otro absurdo seudónimo
seguiría
apestando a rosa.
De entre los
ruidos©, 2015.
#publicado en La
Avispa (Grupo de la palabra, nº 59, 2013)