abril 14, 2021

SIN NOMBRARME


Una gota de sangre nos endereza el espinazo Nos corroe como si fuéramos de espuma Nos convierte en saliva atravesada En juego opaco con vitrinas espléndidas

Por cucharadas, la vida obliga en sus angustias Corre la ficha de los huesos bajada al sótano sin habla A basuras pulcramente anegadas con millones de tilos invisibles

Una sola epidermis para burlar tanta imprudencia, tanta gratuita llaga ardida, tanto cristal tumbado en primavera

Las señas deshonestas del exterminio Los ramos de la encina con su frío, los galgos del destino amotinados, el corazón que yace en su intemperie, me saben alumbrada

Se entregan a mi nombre sin nombrarme

 


María Meleck Vivanco (1921 – 2010)