Páginas

diciembre 26, 2013

★CIERTAS ESTROFAS-POSTALES DE LAS TIERRAS BLANDAS



Había otro perfume que el mar repetía,

otro portal de balneario desnudo, otro Santo,

salpicado de sal atlántica y de médanos inflados.

Había otro tarareo de armónica

pernoctando en la orilla,

que prometía epopeyas, apadrinaba edificios y amontonaba febreros

confundidos a veces con la efervescencia náutica

en el vaivén de un muelle

o en el danzar derretido de las matas bosquejadas que forman los tamariscos

Había otro suelo calado de aguas de Gruta,

castillos de arena ilesos,

supervivientes épicos de sudestadas y de Fiestas Nacionales.

Había otro perfume a playa aceitunada,

otra vereda crecida, otro costal de almejas que el mar cuchicheaba.

Había otro barco amodorrado fantaseando corvinas rubias,

y otro poco de olores con viento norte.

Había otro recuerdo urgente,

otro virar en pausa de intrusos conocidos que juntan hojas de pino,

de carpas y parasoles que suspiran fuego,

de pasajeros perdidos

que vuelven a casa.



Texto ganador del Certamen Anual de Literatura Internacional LAIA, octubre de 2013.